Jesús Robledo Blanco es, actualmente, uno de los fotógrafos permanentes del Mundial de MotoGP.
Su pasión por el mundo del motor (tanto por las dos como por las cuatro ruedas) ha formado siempre parte de su ADN y ha sabido trasladarla a su faceta profesional. Consiguió aunarla con su otra pasión y, desde hace más de una década, profesión: la fotografía.
Tras estudiar Diseño Gráfico en el año 2000, la asignatura de Fotografía le fascinó hasta el punto de hacer las maletas y marcharse a Barcelona a estudiar Fotografía durante cuatro años. Ya metido en vereda, tuvo claro muy pronto que se quería dedicar a la fotografía deportiva.
Su toma de contacto profesional fue con la fotografía publicitaria, pero no tardó en meterse de lleno en su verdadera pasión: el motor. Primero fue como fotógrafo de rallys y carreras de coches, hasta acabar asomando la cabeza en rodadas de motos, y en campeonatos como el FIM CEV (certamen que a día de hoy sigue cubriendo) y también en el Mundial de MotoGP.
Su trabajo y el atractivo estilo de su fotografía le abrieron puertas cada vez mayores dentro del Mundial de MotoGP, hasta el punto de convertirse en fotógrafo permanente y trabajar para Milagro, la agencia más importante dentro del paddock del Campeonato del Mundo.
También ha realizado trabajos para diferentes equipos del campeonato y para algunas de las publicaciones más destacadas del sector de la moto en España como Motociclismo y MOTORBIKE MAGAZINE.
Un estilo muy propio
Si hay algo que destaca el trabajo de Jesús Robledo es la constante búsqueda de esa foto diferente a las demás. Huye de lo típico, y tiene un estilo marcado y variado: le gustan los primeros planos, pero también las composiciones y buscar detalles llamativos que hacen que la fotografía hable por sí sola.
Ya sea en parrilla de salida, desde los boxes o desde los viales, Jesús ofrece un estilo muy completo con su trabajo, lo que le ha hecho ganarse ese difícil hueco en el Mundial de MotoGP.